Buena voluntad en Sevilla...
Informábamos hace días del Consejo Informal de los ministros de Medio Ambiente de la UE, en el que se tenía que hablar de la continuación del proceso de negociación del clima y de liderazgo del mismo por parte de la presidencia española.
¿Resultados? Seguimos con las buenas palabras:
" Los ministros de Medio Ambiente de la UE coincidieron en expresar su “voluntad” de consolidar un proceso “rápido y eficaz” contra el cambio climático, según señaló la secretaria de Estado española para el Cambio Climático, Teresa Ribera, al término del Consejo Informal de este ámbito celebrado en Sevilla.
Teresa Ribera insistió en la “comparabilidad de esfuerzos” en la reducción de emisiones contaminantes y señaló que tanto el 20 por ciento como el 30 por ciento de reducción de emisiones barajado en distintas ocasiones forman parte de los argumentos de la UE, que busca un “esfuerzo integrador” que será debatido próximamente, [para ver si] la UE rebaja un 30 por ciento sus emisiones o se instala en el 20 por ciento conocido.
Teresa Ribera afirmó que Europa tiene la voluntad de reducir las emisiones de CO2 en un 30 por ciento en 2020, respecto a los niveles de 1990, aunque vinculó ese objetivo a la actuación del resto de países. "
"Decepción" en el Parlamento europeo
Posteriormente, el día 20, la ministra Espinosa compareció ante el Pleno del Parlamento Europeo en Estrasburgo para explicar los resultados de la pasada Cumbre del Clima, celebrada en Copenhague, y "los retos a los que se enfrentan a partir de ahora la Unión Europea en su conjunto y la Presidencia española de la UE en la lucha contra el cambio climático."
La ministra "puso de manifiesto el interés de los Veintisiete para poner en práctica de forma inmediata el contenido del llamado Acuerdo de Copenhague, con el fin de avanzar con rapidez y eficacia en el proceso de negociación internacional de cara a la próxima Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Naciones Unidas para el Cambio Climático (COP16), que tendrá lugar en México en noviembre."
Respecto al "acuerdo", la ministra ha destacado "la existencia de una estrategia común en el seno de la UE para trabajar en el cumplimiento de los objetivos propios de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y facilitar así una reducción global que garantice que la temperatura media del planeta no se incremente por encima de los 2 ºC."
Así, Espinosa ha subrayado "la importancia de culminar el proceso de comunicación formal a Naciones Unidas del compromiso de reducción de la UE antes del 31 de enero. (...) sería deseable que el número de países y la intensidad de los compromisos fuera lo más amplia y ambiciosa posible, para poder profundizar en los próximos meses en la senda iniciada en enero."
Pese a la valoración más bien positiva del "acuerdo" por parte de la ministra, en el mismo pleno, los eurodiputados expresaron su "decepción por el fracaso a la hora de conseguir un acuerdo vinculante durante la cumbre de Naciones Unidas sobre cambio climático".
¿31 de enero?
Respecto a las informaciones de los últimos días sobre si el "plazo" establecido por el "acuerdo" del 31 de enero para que los países presenten objetivos de reducción de emisiones había sido "anulado" o "flexibilizado" por parte de la ONU, las palabras de Yvo de Boer, secretario de la Convención sobre Cambio Climático (aunque erróneamente interpretadas), son claras: "No espero que todos cumplan con el plazo. Es un límite flexible. No les estamos preguntando a los países si quieren adherirse, sino que indiquen si quieren estar asociados al acuerdo".
Eso ya lo sabíamos: el "acuerdo", al no ser legalmente vinculante, es una mera declaración de intenciones que no obliga a nada ni siquiera a los firmantes, una veintena de los 192 países de la Convención.
Aún así. "La UE cumplirá los términos del acuerdo suscrito en la Cumbre del Clima de Copenhague y comunicará a la ONU sus objetivos de reducción de emisiones antes del 31 de enero.", según unas nuevas declaraciones de Teresa Ribera, aunque la ONU permita algo de "flexibilidad" en los plazos (que ya se daba por descontada, como hemos explicado), "Europa será fiel a lo acordado y trasladará sus planes de reducción antes de final de mes".
En cuanto a los planes de reducción de la UE, Ribera se reafirmó en que "la decisión de Europa no ha cambiado respecto a Copenhague" y que mantiene el compromiso de recortar sus emisiones el veinte por ciento respecto a los niveles de 1990 y llegar al 30 por ciento si los países emergentes y los más contaminantes del planeta hacen "esfuerzos comparables".